27 de septiembre de 2020. Cada 27 de septiembre se celebra el Día Mundial del Turismo, fecha en la cual se pretende generar conciencia sobre la importancia que tiene la industria para el desarrollo de diversos sectores debido a sus alcances culturales, económicos, sociales, entre otros.
La Agencia de Promoción Turística de Centroamérica (CATA por sus siglas en inglés) impulsa entre sus acciones estratégicas la constante planificación, coordinación y estimulación de la promoción turística de la región centroamericana, como un multidestino turístico lleno de experiencias complementarias entre los pueblos y culturas de la región.
En los últimos 10 años el turismo regional registró un crecimiento sostenido. De acuerdo con datos de la Secretaría de Integración Turística Centroamericana (SITCA) en el 2018, la región fue visitada por 24.2 millones de turistas y excursionistas.
Lo anterior, representa beneficios significativos para los países y comunidades de la región, siendo el turismo una de las fuentes principales de trabajo. Es importante mencionar que alrededor de 1.3 millones de empleos provienen de fuentes directas vinculadas a la cadena de valor de la industria turística.
El turismo tiene rostro humano y su contribución a la creación de oportunidades para mejorar la calidad de vida de las personas es tangible. Más del 90% de los proveedores turísticos son mipymes, el 51% son administradas o son propiedad de mujeres y más del 60% de los equipos de trabajo están integrados por mujeres.
No obstante, el turismo está enfrentando uno de los retos más difíciles de este tiempo: la crisis sanitaria mundial por la COVID-19. De acuerdo con la Organización Mundial del Turismo (OMT) entre enero y junio del presente año, el turismo internacional cayó un 93%. En el caso de las Américas, incluyendo Centroamérica, la llegada de viajeros se redujo un 65%.
Los países de la región han tenido que rediseñar sus estrategias en la oferta turística y enfocarse en crear opciones de turismo dirigidas a garantizar la seguridad y demanda de los turistas en la etapa post-COVID19. Así mismo la industria turística se encuentra ante un cambio de paradigma en el que prima una visión más sostenible del turismo.
Lea: Pueblos multiculturales, la magia de Centroamérica
Ante este nuevo contexto, el turismo rural se presenta como una de las grandes oportunidades para el arraigo cultural y desarrollo de los pueblos, permitiendo potenciar y cuidar los recursos naturales, así como ofrecer al turista la oportunidad de experimentar la cotidianidad de las comunidades y sensibilizarlos hacia el valor de la identidad.
La diversidad de actividades que ofrece el turismo rural es bastante amplia, y se adapta a las preferencias de los viajeros. La promoción y práctica del turismo rural conlleva un gran compromiso, pero también fortalece un desarrollo sostenible para los pobladores de los destinos turísticos.
Lea: Turismo de naturaleza, conservación y avistamiento de vida silvestre en Centroamérica